Necesitamos del aporte de todos

Necesitamos del aporte de todos

Vivimos una oportunidad histórica. Atravesamos un período crucial para definir el rumbo y establecer las prioridades del mañana. Hoy, como en ningún otro momento de la historia reciente, enfrentamos una coyuntura que afecta al mundo entero, pero nos trae la oportunidad de compartir una visión conjunta para el futuro del país. Los últimos meses de

Vivimos una oportunidad histórica. Atravesamos un período crucial para definir el rumbo y establecer las prioridades del mañana. Hoy, como en ningún otro momento de la historia reciente, enfrentamos una coyuntura que afecta al mundo entero, pero nos trae la oportunidad de compartir una visión conjunta para el futuro del país.

Los últimos meses de pandemia, marchas y bloqueos, nos obligaron literalmente a parar para escuchar y reflexionar. Han sido momentos profundamente difíciles, de grandes pérdidas y dolores; en medio de una inmensa polarización y una crisis profunda de confianza. Pero en mi opinión, esta coyuntura puede ser un punto de inflexión y un nuevo comienzo para Colombia. Como le escuché recientemente a líder político joven, “miles de colombianos están cansados de sobrevivir y quieren poder realmente vivir”, en un país que centre sus esfuerzos en disminuir las brechas sociales y ofrecer oportunidades a las nuevas generaciones.

En los últimos meses he sido testigo de una movilización sin precedentes del sector empresarial y productivo del país; y creo que hoy más que nunca,  estamos reconociendo el rol que podemos y debemos asumir para el enfrentar los retos del presente y construir un nuevo capítulo de la historia  de Colombia. Pero reconociendo las buenas intenciones y el interés genuino por aportar, la experiencia de las últimas semanas también nos ha dejado dos mensajes fundamentales: ¡Tenemos que escuchar! Si queremos ser efectivos en nuestras propuestas, tenemos que estar dispuestos a soltar algunas de nuestras creencias para poder oír otros puntos de vista con genuina curiosidad, buscando completar nuestra versión de la historia. Y segundo, el mensaje ha sido muy claro: Para sacar a Colombia adelante, necesitamos del aporte de todos.

Como lo mencioné al inicio, estoy convencido que el 2021 puede pasar a la historia como el año en el que los colombianos decidimos unirnos alrededor de un sueño compartido; una Colombia próspera, más equitativa y llena de oportunidades; un país donde el “bienestar” tema central de esta edición, sea realmente una posibilidad para todos. Nos llegó el momento de soltar el espejo retrovisor que nos mantiene anclados en el pasado y dejar de lado nuestras diferencias, para poner los mejor de nosotros al servicio de esta nueva historia.

De mi parte y en nombre del todo el equipo humano de Amarilo, hoy ratificamos nuestro compromiso con el país; seguiremos creyendo en Colombia y soñando en grande; seguiremos generando oportunidades y aportando a la calidad de vida de las familias colombianas.